En esta ocasión, te hablaremos de las diferencias entre los cobots y los robots industriales. En otros artículos, te hemos expuesto que adquirir un cobot con un retorno de inversión garantizado es posible; sin embargo, como expertos en control de movimiento, automatización y robótica, siempre te recordamos que, el cálculo (en conjunto con la simulación de las aplicaciones) es clave para que el dispositivo que implementes cumpla todas tus expectativas. En ese sentido, una pregunta recurrente cuando se considera integrar robots al entorno de trabajo es ¿cuándo utilizar un cobot y cuándo un robot industrial?
Robots industriales y cobots: ayuda en dos formatos
El robot industrial es un manipulador multifuncional, controlado automáticamente, reprogramable en tres o más ejes, que puede estar fijo o móvil para uso en aplicaciones de automatización industrial”.
Norma UNE-EN ISO 8373:2012
El desarrollo socioeconómico de la segunda mitad del siglo XX planteó diversos escenarios en los que la robótica fue teniendo usos cada vez más extendidos. Los robots salieron de la ficción para pasar a formar parte de las filas de operadores en las industrias. Unimation fue la primera empresa de robótica y fue fundada por Charles Devol y por Joseph Engerlberger en 1958. Dentro de este proyecto, el primer brazo robótico fue concebido por Devol, originalmente, como un dispositivo de transferencia programada de artículos; así, patentó el prototipo Unimate#001, el cual fue integrado por General Motors en su planta de fundición automotriz en 1962 para llevar a cabo la soldadura en troquel.
En su origen, una de las motivaciones de Devol para desarrollar este dispositivo robotizado fue la de hacer más fácil el trabajo para los humanos dentro de la industria y salvaguardarlos de situaciones peligrosas (como el desplazamiento de diferentes piezas a lo largo de una cadena de montaje o soldar los elementos que componen un vehículo). Bueno, en ese sentido, los robots industriales comparten la misma motivación inicial que la de los robots colaborativos, vemos…
Varias décadas de innovación e investigación pasaron hasta llegar al surgimiento de los cobots en la década de los 90. Para entonces, la tecnología se fue refinando en dispositivos cada vez más pequeños y con mayor capacidad. Si bien, Edward Colgate y Michael Peshkin dieron al mundo la creación de los cobots, los diferentes fabricantes, líderes internacionalmente, han contribuido desde entonces a la sofisticación de esta herramienta con mejoras tales como algoritmos de control de fuerza y sistemas de visión.
De esta forma, los cobots y los robots industriales tienen un interés común desde su origen: mejorar la vida de los humanos. De ahí que, su evolución siempre esté orientada a ayudar de forma segura y eficiente a las personas. No obstante, el paso del tiempo ha hecho que los propósitos de ambos tipos de robots (cobots e industriales), se bifurquen y se diferencien notablemente.
Entonces, a diferencia de un robot industrial, con un cobot puedes…
● Tener el dinamismo preciso para sustituir fallos que se ocasionan en la producción.
● Tener un robot que es muy fácil de programar y reprogramar.
● Romper con la dependencia de un servicio técnico.
● Adquirir una herramienta innovadora sin importar la dimensión o el giro de tu empresa.
● Aprovechar el talento humano de tu empresa para que se desarrolle en otras áreas y evitar así problemáticas asociadas con la rotación de personal y deserciones.
● Responder a una operación que exige tiempo completo (24/7).
Y… ¿por qué no? Aumentar el distanciamiento social entre tus colaboradores para garantizar las medidas sanitarias que rigen nuestra forma de vida actual.
¿Cómo elegir un cobot?
Ahora que conoces estas diferencias, sabes que los cobots son especialmente adecuados para tareas repetitivas, aplicaciones ligeras y manipulación de cargas útiles no superiores, idealmente, a los 20 kg. Ahora bien, aunque los cobots implican analizar menos variables en comparación con los robots industriales, es importante que tengas muy presente su nivel de destreza con base en tu producción, sus niveles de fuerza, así como la geometría o peso de la pieza que deberán manipular.
Además, los cobots son robots de tamaño pequeño o mediano que están articulados y, por ello, debes considerar específicamente los siguientes aspectos durante tu proceso para elegir tu aliado cobot ideal:
- La carga estática máxima (payload).
- El alcance (reach).
- El número de ejes (suelen ser de 6 o 7)
